¿Cómo gestionamos nuestras viviendas?

¿Qué me puede aportar una gestión colectiva de la vivienda?

La gestión de la vivienda una vez finalizada su construcción o rehabilitación implica como mínimo el mantenimiento y limpieza de los espacios comunes tanto del interior del edificio como aquellos exteriores vinculados a él, la gestión del dinero necesario para estas acciones y la organización de la comunidad que haga posible que estas tareas se desarrollen de la mejor manera posible. En los proyectos colectivos la gestión de una vivienda puede abarcar otros aspectos de la vida en comunidad que generarán un nivel de relación mucho mayor entre los residentes.

Esta gestión se puede desarrollar de tres maneras básicas, a partir de la autogestión, subcontratándola o a partir de un mecanismo mixto. Mediante la autogestión nosotros mismos nos organizamos para desarrollar estas tareas. La subcontratación busca que otras empresas o colectivos especializados realicen esta gestión y que los residentes únicamente aprueben aquello que puede ser extraordinario. La gestión mixta es un punto intermedio donde una empresa o colectivo especializado gestiona una comunidad pero se busca la participación y organización de la comunidad en aquellos aspectos que ésta pueda considerar más relevantes.

• Podemos decidir la manera de plantear los temas relativos al colectivo y cómo tomar las decisiones: mediante asambleas, estableciendo grupos de trabajo, estableciendo papeles de mayor liderazgo.
• Podemos decidir cómo queremos gestionar y usar los espacios comunes
• Podemos decidir qué servicios queremos que la comunidad ofrezca y cómo gestionarlos.
• Podemos plantear que tipo de energía queremos consumir, cómo gestionarla, si podemos introducir la producción de energías renovables, etc.
• Podemos evaluar e intentar reducir los costes de la comunidad, o plantear alternativas para su financiación.
• Puede facilitar el establecimiento de mecanismos de ayuda mutua para el mantenimiento de la comunidad, el apoyo en los costes de mantenimiento, etc.
• Facilita el establecimiento de lazos de confianza entre vecinos/as que pueden trasladarse a proyectos colectivos o de ayuda.